Alimento

Como alimentos se pueden considerar todos aquellos elementos que los seres vivos consumen, ya sea comiéndolos o bebiéndolos, con el fin de asegurar su subsistencia.

Esta palabra tiene su origen en el latín Alimentum y se utiliza para hacer mención de cada una de las sustancias que sirven para nutrir a los humanos, independientemente de que éstas se presenten en estado líquido o sólido.
Uno de los objetivos principales de los alimentos es permitirle a quienes los ingieren regular y mantener sus funciones metabólicas.
En ese sentido, al carecer de alimentación, los seres vivos no dispondrían de una buena salud y estarían propensos a la muerte.
Por otro lado, los alimentos también juegan un papel importante en el aspecto psicológico de los individuos, ya que les ofrecen una sensación satisfactoria a quienes los consumen. En casos como éste, el alimento no sólo cumple un rol nutritivo, sino que le genera placer a la persona, como ocurre cuando alguien come su plato favorito.
Gracias a que se caracterizan por generar una acción bioquímica, los nutrientes son considerados los elementos contenidos en los alimentos que más ayudan en el mantenimiento de los organismos que gozan de vida.
La importancia de los nutrientes radica en el hecho de que son precisamente ellos los que aportan energía y promueven la metabolización de otras sustancias que también son esenciales para la permanencia de la vida.
Entre los nutrientes más comunes presentes en los alimentos se encuentran las proteínas, los carbohidratos y las vitaminas, los cuales son de condición orgánica, al tiempo que los minerales y el agua se clasifican como nutrientes inorgánicos, cada uno de los cuales cumple una función vital en el organismo.