La palabra amante es un término relevante para el adulterio o infiel, que ahora es ilegal en algunos gobiernos del mundo. El término ha sido usado en origen y se refiere a una mujer mantenida, cuyos gastos resuelven a un hombre en una posición cómoda para tener un nivel de vida cómodo (o sofisticado), y por lo tanto es posible que esté a su disposición para proporcionar placeres sexuales.
El otro de los usos extendidos del término, llamado amante de esa persona, hombre o mujer, que mantiene relaciones esporádicas y ocultas con otra persona casada, por lo tanto, este último será infiel a la persona con la que está legalmente casado. En general, el amante ocupa un segundo lugar en la vida amorosa de la persona con quien mantiene ese tipo de relación, aunque es una relación estable, es decir, generalmente permanece en el tiempo y aunque no es una condición sine qua non, es recurrente que el hombre asuma algunos gastos de su amante, como, por ejemplo, el del departamento o la casa en la que se encuentran relativamente.
Las relaciones entre amantes no son ligeras y fugaces. Los amantes son cómplices, amigos y ponen su secreto en manos del otro. Tener un amante es un ejercicio supremo de confianza y entre estos en algunos casos se crea una unión tan fuerte que dura años. Algunos psicólogos consideran que la elección de una persona en tener un amante es por falta de algún ingrediente en su relación legal o matrimonio, que por tal ausencia busca este ingrediente en otra persona.
Para la literatura y el cine, se expresa el amor y la pasión como un movimiento mundial, a menudo se han inspirado en los amantes. Es por eso que ha habido trabajos como estos:
• La película de Vicente Aranda llamada ¨Amantes¨ del año 1991 que se basa en la vida de un niño que está entre dos mujeres: su novia y su amante.
• «Amantes del pasajero». El cineasta Pedro Almodovar en el año 2013 estrenó esta película que refiere a refleja a las relaciones establecidas entre los pasajeros de un avión.