Análisis microbiológico

En la industria dedicada a la crianza de animales destinados al consumo del hombre, este estudio le permite saber a quien lo aplica si los alimentos que se utiliza en la nutrición de los mismos contienen microorganismos patógenos, es decir, bacterias y hongos.
El análisis se lleva a cabo por medio de la aplicación de pruebas microbiológicas, o lo que es lo mismo, a través de cultivos elaborados con ese fin.
Se debe hacer notar que el objetivo principal de este estudio es realizar la inspección del alimento, para determinar si presenta o no patógenos y, en caso de ser positivo, su carga (cantidad), grado de patogenicidad y, posiblemente, la cantidad de alimento contaminado que ya ha sido ingerido por el animal, a fin de saber si está apto para su posterior procesamiento como alimento para la especie humana.

Los principales agentes patógenos que se pueden manifestar en los alimentos que consumen los animales son los estafilococos, el coli, la salmonella, mohos y la levadura.
La principal pretensión con la realización de este tipo de análisis y sus resultados es concluir si existe algún riesgo para la salud animal y, además, conocer cuáles son los elementos que lo exponen a la contaminación, con el objetivo de evitarlos.
El análisis microbiológico forma parte de la bromatología, ciencia que también está integrada por el análisis toxicológico y el análisis químico.
La investigación microbiológica que se realiza en torno a los alimentos que se destinan al consumo animal también es aplicada a la materia prima que se usa con el mismo fin, por lo que su funcionalidad e importancia es hoy en día imprescindible en esta industria.