El atomismo es una teoría filosófica griega fundada por Leucipo y Demócrito durante el siglo V aC. Esta teoría establecía que el universo estaba compuesto por pequeñas partículas denominadas átomos, que según leucipo eran indivisibles y de vacío. Esta doctrina disminuye toda estructura de la realidad a sólo la suma de un conjunto de elementos integrantes que, en sí mismos, son inseparables.
Por lo tanto, el atomismo es una manera universal de percibir la realidad. Existen diversas formas de atomismo, las cuales dependen del tipo de estructura real que pretenda explicar y la naturaleza de los átomos que elija como últimos factores integrantes de esa realidad, algunos de ellos son:
Atomismo cosmológico o físico: este atomismo es un fiel defensor de la teoría de que los seres reales están compuestos por partículas únicas de naturaleza material, es decir por átomos materiales. Puede clasificarse de dos maneras: físico absoluto, en donde el ser real es entendido como, el conjunto de seres reales que no sólo abarca lo físico, sino también lo espiritual. Físico relativo, establece que la teoría atomista solo tiene valor en los seres corporales, materiales, quedando descartada de su área de aplicación todo lo relacionado con lo espiritual.
Atomismo psicológico, establece que la vida espiritual y psíquica en su totalidad se encuentra dividida en una serie de elementos llamados átomos psíquicos, de los cuales se piensa, que derivan los diferentes fenómenos místicos.
Atomismo biológico, esta clase de atomismo pretende aplicar la tesis atomista al ser viviente, en donde éste es considerado un compuesto de elementos biológicos primarios, en donde el todo, representa la suma de las partes que lo integran, llegando a ignorar la naturaleza estructural del organismo.
Atomismo social, presenta a la sociedad como un grupo de individuos que presentan ninguna característica en común, que no son capaces de concebir la idea de compartir o de tener una identidad más allá de lo individual. Este tipo de atomismo se opone al principio de cohesión comunitaria, convirtiéndose en una de las formas más insensibles de individualismo, que solo el capitalismo es capaz de crear.
El atomismo lógico sostiene que la última sustancia del mundo se encuentra representada en los átomos lógicos, es decir, sabores, sonidos, relaciones, etc., Aunado a hechos, que también se encuentran compuestos de átomos lógicos. Por ejemplo: el hecho compuesto de que “Carlos y María están en el campo” se encuentra formado por hechos simples como “Carlos está en el campo” y “María está en el campo”.
En fin, la manera como la escuela atomista concibe a la naturaleza es de forma materialista absoluta, explicando todos los fenómenos naturales en función de la forma tamaño y cantidad de los átomos, disminuyendo de esta manera las características sensoriales de las cosas (frio, calor, gusto, etc.), a la disparidad cuantitativa de los átomos.