Bebesiosis

También llamada «babesiasis», es cualquier infección causada por especies del género Babesia. La enfermedad parasitaria se transmite por garrapatas y generalmente afecta a los animales domésticos, principalmente al perro. La clase encontrada en roedores ha sido identificada como la causa de la enfermedad en humanos. Sus síntomas pueden ser: fatiga, dolor muscular, fiebre, escalofríos, pérdida de apetito, náuseas, vómitos, dolor abdominal y orina oscura.

Es un parásito que vive dentro de los glóbulos rojos (RBC), parte de ellos se descomponen produciendo anemia hemolítica y el resto se filtran por el bazo, lo que produce diferentes complicaciones. La infección generalmente es asintomática y puede pasar desapercibida. Cuando produce manifestaciones clínicas, generalmente es de naturaleza leve. Los pacientes que tienen un mayor riesgo de sufrir complicaciones graves son asplénicos (ausencia de bazo), inmunodeprimidos o que toman medicamentos inmunosupresores. El período de incubación después de la picadura de la garrapata es de 1 a 6 semanas, los síntomas son los siguientes:

  • Malestar general.
  • Fiebre.
  • Dolores musculares y articulares.
  • Transpiración.
  • Dolor abdominal, náuseas / vómitos y diarrea.

El término Babesia (sinónimo Nuttallia) es un género de protistas parasitarios que causa la enfermedad de la babesiosis en animales y humanos.
Por otra parte, la babesiosis bovina es transmitida por parásitos y garrapatas del género Babesia que generalmente se caracteriza por una extensa lisis eritrocítica que conduce a anemia, ictericia, hemoglobinuria y muerte. Existen al menos 6 especies babesia que se responsabilizan por la enfermedad febril, estas se agrupan por su tamaño, ya sea grande o pequeño.
Dependiendo de la extensión de la enfermedad y sus síntomas, será el tratamiento. Además la babesiosis produce microbios como el Babesia microti y Babesia divergens. En términos generales, consistirá en medicamentos antiprotozoarios.
Algunos pacientes de clasificación asintomáticos, no necesitan un tratamiento específico a diferencia de:

  • Estos pacientes sin síntomas, pero con parásitos sanguíneos. Se detecta al hacer un frotis de sangre.
  • En los pacientes asintomáticos el protozoo permanece en el cuerpo y, por lo tanto, se recomienda iniciar otro ciclo de tratamiento. Todo esto después de tres meses del episodio agudo.

Los síntomas comienzan a desaparecer después de dos días, aunque la incomodidad y la fatiga se pueden mantener durante hasta tres meses. Si en este momento todavía hay síntomas, es aconsejable realizar un nuevo frotis o PCR para ver si todavía hay protozoos en la sangre. En el caso de un resultado positivo, se debe programar un nuevo ciclo de tratamiento.