El término biodegradable está íntimamente ligado a la ecología, ya que es la facultad de algunos materiales de reintegrarse a la tierra por medio de la acción del medio ambiente, es decir, todo material orgánico e inorgánico tiene un tiempo de duración y es el medio ambiente el principal causante de su descomposición con ayuda principalmente de bacterias y microorganismos.
La velocidad en que una sustancia se descompone va a depender de múltiples factores, entre los que destacan: la estabilidad de su molécula y el medio en donde se encuentre, ya que es lo que va a permitir que están biodisponibles para los agentes biológicos y sus enzimas.
El proceso de biodegradabilidad es muy complejo, ya que un desecho puede ser el abono para más vida, el papel por ejemplo puede ser empleado como alimento para microorganismos que estos a su vez lo utilizan para producir energía y crear otras sustancias u organismos. Asimismo, este proceso puede ocurrir de dos formas las aeróbica (que es con oxígeno, su descomposición ocurre al aire libre) y anaeróbica (sin oxígeno, se descompone bajo el suelo).
Un elemento que no puede ser degradable es el vidrio. Aunque expertos señalan que el tiempo de descomposición es extremadamente largo o los organismos no tienen la capacidad suficiente para procesarlo, tal y como pasa con el plástico y las latas de aluminio.
Estos son algunos ejemplos del tiempo que tarda en descomponerse los materiales:
cáscara de banano o cambur de dos de diez días, papel de dos a cinco meses, concha de naranja, seis meses, filtros de cigarro de uno a doce años, zapatos
hechos de cuero de veinticinco a cuarenta años.
Algunas de las ventajas de los materiales biodegradables es que la absorción del producto por parte de la naturaleza es muy rápida lo que evita la contaminación.
También a la hora de reciclar es mucho más sencillo y económico, dado que no se usan productos químicos para su descomposición, lo que hace que los productos biodegradables sean más amables con el planeta.
Entre los efectos negativos de productos no biodegradables es que el exceso de productos no biodegradables tardan años en desaparecer de los basureros, ya que no cuentan con áreas especiales para este tipo de materiales, algunos de este tipo como el plástico tardan hasta 500 años en descomponerse. Tanto plantas, humanos y animales son afectados debido a este tipo de residuos.