Cuenta

Usado como elemento fundamental en la contabilidad una cuenta es el elemento que permite llevar a cabo la clasificación de las operaciones financieras y comerciales. A través de las cuentas, que generalmente se trazan en forma de T y se dividen en débito (débito) y crédito (Haber), esas transacciones se registran en los libros de contabilidad.

Ya sea, la cuenta de una empresa o institución, el personal constituyendo además en el registro principal en el que se expresa los aumentos y disminuciones que pueden sufrir algún valor, activo, pasivo o patrimonio como resultado de las operaciones llevadas a cabo por la empresa, empresa o persona, según corresponda. Un ejemplo de esto puede ser: Las cuentas se clasificaron, para poder traducirlas de manera ordenada en el libro de contabilidad que corresponda y también para tener una medida final de los activos, derechos y obligaciones de las empresas o negocio que está disponible o estará disponible en una fecha específica.
Una cuenta es básicamente es un cálculo o una operación aritmética o matemática, es decir, todos aquellos ejercicios que requieren el uso de números. Si pensamos en una operación, mantener un registro de las cuentas es esencial, ya que depende de que nuestra compañía esté en orden y bajo control, especialmente porque están hablando de dinero y una cuenta mal administrada puede generar pérdidas de ingresos. En las cuentas, las transacciones realizadas en la operación en cuestión se clasificará de manera total, es decir, se debe llevar a cabo un control exhaustivo de la entrada y salida de dinero.
Una cuenta facilita el control sobre los valores de los que está disponible y la razón justificada para los valores que se van, este registro debe hacerse de forma clara, ordenada y comprensible para luego volcarlo en general y que nosotros de por supuesto, no hay diferencia ni a favor ni en contra, y estar al tanto del estado financiero de nuestra empresa o nuestro personal.
Otro uso del concepto menciona la cuenta como el depósito de dinero que se realiza en una institución financiera. El titular de una cuenta corriente puede endeudarse o acreditarse; ya que este puede usar dinero a crédito (incurrir en deudas) y pagarlo más tarde. Otro tipo de cuenta es la cuenta de ahorro, por medio de la cual el usuario solo tiene a su disposición el dinero que ha depositado: «Quiero hacer un retiro, por favor: tengo una cuenta en la sucursal del centro».