Cuento Fantástico

El cuento fantástico es la narración de la realidad que mezcla elementos reales e irreales, extraños e inexplicables, con la intención de crear incertidumbre en el lector a través de la intercalación entre una explicación natural y una sobrenatural.

El autor de historias fantásticas cuenta una historia envuelta en elementos misteriosos e inexplicables. Por lo general, en los relatos de estas historias hay una combinación de realidad y fantasía.
El mundo de la historia fantástica generalmente se presenta con una apariencia realista, es decir, los elementos y los personajes son identificables por el lector. A pesar de la perspectiva realista, aparecen hechos extraños y más allá de lo normal.
Por su parte, la historia fantástica es un subgénero de la historia y su detalle más destacado es la presentación de una dimensión irreal y de fantasía en el curso de los acontecimientos narrados, de todos modos, esto no implica la desaparición de la realidad, hay una combinación de elementos reales y fantásticos.
Respeta las condiciones mencionadas de la historia, es decir, propone la historia, la narración de los acontecimientos cotidianos, aunque, en un momento determinado de la historia, ocurrirá un evento fantástico, que escapa a la comprensión de la realidad y cambiará la historia en una historia fantástica
Las propuestas de este tipo suelen ser presentadas por sus autores desde un ángulo realista, es decir, los elementos y los personajes son absolutamente creíbles y reales para el lector, pero coexisten con extraños sucesos que escapan a la normalidad.
En los cuentos fantásticos hay temas que generan extrañeza pueden ser diversos: personajes con dobles de otras épocas, alteraciones de las coordenadas de tiempo y espacio, la confusión o mezcla entre sueño y realidad o apariencia de sobrenatural seres. La formación de estos mundos extraños y personajes irreales crea una atmósfera inquietante en la historia.
Por lo general, los personajes de las historias fantásticas son comunes y actuales, por lo que el lector puede identificarse con ellos a pesar de que las circunstancias de la trama son fantásticas.
Una de las características de los cuentos fantásticos es que espacio en el que viven los personajes es ilógico, y siguen reglas irracionales, como en «Alicia en el país de las maravillas«. Por la suma de elementos reales y elementos extraños e inexplicables, hace que uno vacile entre una explicación natural o sobrenatural y deja al lector sumido en la incertidumbre.
El cuento fantástico está estructurado de la siguiente manera: evento inicial (parte que consiste en la presentación de los personajes que se encuentran en el espacio y el tiempo), nudo (en ese momento el desequilibrio con respecto a la historia del principio y no hay una transformación en términos de ello) y el resultado (se caracteriza por no resolver el conflicto, pero aún más, genera otro que aumenta la duda de todo lo que se informa).
Por lo general, en este tipo de cuento recurren a un final abierto.