En el estricto sentido verbal de la definición, el término «cuero ecológico» no tiene un significado formal. Sin embargo, existe un interés significativo en los cueros que implican un mejor desempeño ambiental.
La fabricación de cuero tiene un impacto ambiental, tanto como en el proceso de fabricación no todas las entradas terminan en el cuero. También cuando el cuero se elimina el producto se convierte en un material de desecho. Lo que parece haber ocurrido es que el indicador de la «eco-ness» de un cuero se mide por la ausencia de ciertos productos químicos restringidos, tales como colorantes azo prohibidos, PCP, cromo VI, formaldehído y una lista creciente especificada por las marcas; O el método de curtido en lugar de cualquier consideración del impacto ambiental real. Este empuje se originó en el sector automotriz (donde el reciclaje de piezas automotrices está regulado en Alemania), pero más recientemente por grupos de presión ambiental, etiquetas ecológicas, minoristas de calles o aquellos que buscan obtener ventaja competitiva a través del posicionamiento de productos.
Mucha gente asume que el cuero curtido vegetal debe tener un perfil ambiental preferido, pero la evidencia no apoya esto. Debe observarse que todo el propósito del bronceado es reticular la matriz de colágeno para evitar la putrefacción y, por tanto, la descomposición.
Por otro lado, a menudo se supone que los cueros curtidos con cromo son menos deseables debido a su contenido de minerales, o creen erróneamente que se curten con la sal de cromo VI tóxica. El cuero hoy está curtido con cromo inerte III y el cromo III es esencial para el metabolismo normal de la glucosa, las proteínas y las grasas y, por lo tanto, es un elemento esencial de la dieta. Esto no quiere decir que los cueros curtidos con cromo no tengan problemas de fin de vida potencialmente mayores que los curtidos comparativos.
Los cueros curtidos con aldehído satisfacen las necesidades del sector automovilístico y parecen encajar en un nicho dentro de los productos infantiles que deben cumplir con EN71/3, pero pueden tener problemas de manejo, tratamiento de efluentes y mayor consumo de energía.