En términos de economía y contabilidad, el devengo es un principio que constituye que todo negocio o intercambio económico debe quedar registrados en el mismo momento en que ocurren, independientemente de la fecha de su pago o de su cobro. Esta norma se encuentra establecida dentro de los PCGA (Principios de Contabilidad Generalmente Aceptados).
La característica fundamental de este principio, es que así una empresa obtiene un ingreso o gasto, que aún no ha sido cobrado o pagado, ésta se tiene que contabilizar en el momento que se origine y no cuando exista la circulación de dinero.
La finalidad del principio de devengo, es garantizar que anualmente la empresa en su cierre contable, traslade a la cuenta de resultados, sólo los gastos e ingresos correspondientes a ese periodo.
Para poder comprender mejor esta norma contable se dará el siguiente ejemplo: si la empresa contrata a una persona en el mes de febrero, pero su trabajo será remunerado, los primeros días de marzo. Este pago o gasto debe ser registrado contablemente en el mes de febrero, ya que fue en ese mes cuando se realizó el trabajo, independientemente si se canceló o no. Este gasto se registrará como sueldos y salarios, con un pasivo por pagar. Cuando inicie el mes de marzo y se efectué el pago, se eliminará el pasivo y se generará una disminución en caja o banco según sea el caso.
Una de las ventajas que ofrece este principio es que además de ser reconocido por el PCGA , permite a la empresa tener una mejor idea de los ingresos y gastos reales de un periodo específico.
En el ámbito tributario el devengo de un impuesto se origina en el momento en que se realiza el hecho imponible y según lo establecido por la ley, nace la obligación tributaria principal.