Escuela

La mejor manera de definir a una escuela es señalando que se refiere a todos los centros de enseñanza, en los que siguiendo un parámetro formalmente establecido, se imparte una serie de asignaturas contenidas en un currículo o programa de formación.
Dicho de una manera más general, todo el aquel espacio en el que se aprende algo, independientemente de que sea bueno o mal, puede considerarse una escuela.
En ese sentido, es comúnmente aceptado que la familia es la primera escuela a la que tiene acceso el ser humano y, así mismo, la calle, el trabajo y la vida, con todas sus facetas, representan una escuela.
A lo largo de la historia diferentes centros formativos han sido considerados una escuela, como ocurría en la Edad Media, en la que este concepto englobaba a todos los lugares donde las personas acudían para adquirir conocimientos en torno a la teología.
Por otro lado, las escuelas confesionales son aquellas cuyas bases son el análisis y puesta en práctica de una religión específica.
Asimismo, existen las llamadas escuelas experimentales, dentro de las cuales se ubican aquellas caracterizadas por la utilización de novedosas técnicas de enseñanza, con el fin de modernizar y contextualizar la educación a los tiempos que van transcurriendo. En otras palabras, son los centros en los que se efectúa una serie de experimentos enmarcados en el proceso aprendizaje-enseñanza que, dependiendo de los resultados obtenidos, serán incorporados al modelo educativo que rija en un espacio geográfico determinado.
No se puede omitir que, también se puede calificar como una escuela al grupo de personas que poseen una doctrina en común. La escuela aristotélica es un buen ejemplo de ello.