El término fraude hace referencia a todos aquellos engaños y daños, en especial de tipo económicos, propiciados deliberadamente hacia un apersona, con el fin de obtener algún beneficio de ello. De forma estricta, es definida como todo acto que es realizado en contra de la rectitud y la verdad. Este, puede ser, en algunas ocasiones, confundido o utilizado como un sinónimo de estafa, aunque el fraude forme parte de toda la red que supone una estafa. Por lo general, este tipo de delitos contra el patrimonio es de menor gravedad en comparación a otros y según el juicio de las leyes, como aquellos en contra de la integridad física de alguien.
Para comprender el papel del fraude en un conjunto de acciones que conllevan a la estafa, es necesario comprender los otros elementos involucrados. Primero se encuentra el engaño, artimaña utilizada para convencer a la víctima sobre ciertos asuntos, que, de alguna forma, le den acceso a sus bienes, y por último el timo, un acto en el que se despoja a alguien de sus bienes después de haberle engañado. El fraude, por su parte, entra escena mucho antes de que esto tome lugar: se trata del acto que conlleva a todos estos; es la deshonestidad que motiva al malhechor a realizar acciones en contra de la rectitud.
Existen diversos tipos de fraudes, como lo son: de ley (negocios que se relacionan con el ámbito jurídico), fiscal (evasión de pago de impuestos), electoral (favorecer a cierto candidato ante otros en un circuito de elecciones), fraude bancario (realizado por entidades bancarias para con sus usuarios), fraude eléctrico (utilización de redes de energía eléctrica sin previos contratos con el proveedor), fraude de paternidad (en el que una mujer asegura que cierto hombre es el padre biológico de una criatura, aunque no lo sea) y el pump and dump (en el que una acción barata es vendida a un mucho más precio alto, mediante la modificación de los documentos de adquisición). Las penas para cada tipo de fraude suelen ser similares, pero las circunstancias pueden hacer que la penalización aumento, puesto que se toman en consideración aspectos como: cantidad de víctimas, método utilizado, capital obtenido y red de ejecución.