La narcolepsia es un trastorno caracterizado por tendencias anormales del sueño que incluyen somnolencia excesiva durante el día, alteración del sueño nocturno y manifestaciones alteradas del sueño REM. La narcolepsia también se caracteriza por alucinaciones durante el período de sueño. Los síntomas generalmente comienzan en la adolescencia o en la adultez temprana, sin enfermedad previa, y persisten durante toda la vida.
La narcolepsia es tan frecuente en los hombres como en las mujeres, una persona con narcolepsia puede tener una crisis de sueño en cualquier momento y el deseo de dormir solo puede soportarlo temporalmente.
Pueden ocurrir alucinaciones vívidas en las que la persona tiene ilusiones visuales o auditivas al comienzo del sueño o, con menos frecuencia, al despertar. Las alucinaciones son similares a las de los sueños normales, pero más intensas. Solo el 10 por ciento de los afectados por la narcolepsia manifiestan todos estos síntomas; la mayoría de la experiencia solo algunos.
El registro de la actividad eléctrica del cerebro por medio de un electroencefalograma (EEG) puede mostrar los patrones desordenados de sueño REM que ocurren cuando la persona se duerme, lo cual es típico de la narcolepsia. No se han observado cambios estructurales en el cerebro o se han detectado alteraciones en los análisis de sangre.
Los tratamientos básicos para combatir la narcolepsia se basan en antidepresivos y estimulantes, del mismo modo, es aconsejable que las personas que sufren de narcolepsia tengan descansos de 15 minutos durante el día y eviten consumir comidas pesadas. El descanso nocturno debería ser suficiente para evitar la descompensación en el ciclo de sueño.
Por otro lado, se recomienda al paciente que realice cambios en su estilo de vida, como tratar de mantener un horario de sueño de rutina, evitar la cafeína, el alcohol y las comidas pesadas y hacer ejercicio regularmente todos los días. Otros consejos pueden ser no fumar y planificar los horarios de la siesta evitar ataques de sueño imprevistos.
A las personas que sufren de narcolepsia no se les recomienda realizar viajes largos, realizar trabajos en los que utilicen máquinas peligrosas y tratar de descansar por períodos cortos de tiempo al día, así como a tomar una siesta, la risa prolongada también puede provocar un nuevo episodio.