Navegador

La palabra navegador tiene sus raíces en el latín navigātor y se define como un adjetivo relacionado con alguien o algo que ejecuta la navegación.
Por otro lado, navegar también es un concepto referente a la realización de un viaje en un barco o, en tiempos modernos, movilizarse por medio de redes computarizadas.
En ese sentido, puede entenderse la navegación desde dos ópticas diferentes, una ligada al hecho de desplazarse a través de medios que utilizan el agua como canal y la otra vinculada con viajes a través del ciberespacio.
Siguiendo ese precepto, se desprende que la persona que se dedica a la navegación en embarcaciones es un navegador o navegante, aunque no sólo se navega utilizando recursos acuáticos, pues también existen los navegantes aéreos, quienes son aquellos especialistas que se encargan de orientar las aeronaves haciendo uso de diferentes técnicas desarrolladas para tal fin.
Mientras que en el campo tecnológico, un navegador web no es más que un programa computarizado o software que genera la capacidad de acceder a los contenidos que se asientan en una página web, aunque se encuentre en un servidor local o haya sido subida a Internet.

Ese navegador ha sido programado por medio de comandos informáticos para descifrar una serie de códigos aleatorios que, generalmente, se registran en lenguaje HTML, con el fin de hacer posible la visualización de la información alojada en una página a través de una pantalla.
Ese proceso también le permite al cibernauta retroalimentarse con el contenido al que está teniendo acceso y a la vez ingresar a otras páginas web por medio de enlaces, que se conocen comúnmente como links o hipervínculos.