Nefrología

En la medicina la nefrología es una especialidad que se encarga del estudio de la función y las estructuras de los riñones, dicha rama de la medicina abarca tanto la prevención como el análisis anatómico,, fisiológicos y demás procedimientos para tratar a las diferentes patologías que afecten a los riñones. Su nombre deriva de griego “nephrós” que quiere decir riñón y también del sufijo “logía” que quiere decir estudio. Se diferencia de la urología porque no es de tipo quirúrgica.

Esta rama de la medicina tiene un amplio campo de estudio, por lo tanto aquellas personas interesadas en estudiarla requieren de estudios muy amplios para lo cual necesitan tener bases sólidas no solo en dicha rama sino en todas aquellas áreas que se relacionen con ella, como por ejemplo la urología, cardiología, etc. Además de ello se debe destacar que la hipertensión arterial tiene especial relación con la nefrología, a tal punto que el nefrólogo tiene que tratar con ella casi que a diario, es por esa razón que la gran parte de unidades dedicadas a esta patología, son asociadas a los servicios nefrológicos.
Esta especialidad tiene marcadas diferencias con respecto a la urología, la cual es una rama de la medicina dedicada a la especialidad quirúrgica que engloba todo lo que tenga relación quirúrgica con los riñones y el sistema genital del hombre. Por lo general la urología se impone sobre la nefrología en casos muy específicos, como por ejemplo en el caso de las infecciones urinarias en donde se deben aplicar en muchas ocasiones tratamientos quirúrgicos.
Para poder llevar a cabo un diagnóstico, al igual que ocurre en otras áreas de la medicina los datos referente a las causas de una sintomatología específica son obtenidos de las historia clínica del individuo, además de ello en la nefrología también son requeridos diferentes análisis de laboratorios relacionados principalmente con los niveles de la creatina, urea, análisis de orina entre otras similares que pueden contribuir a que el diagnóstico sea más acertado, además de ello se suelen realizar pruebas más complejas y especializadas con la finalidad de detectar si hay otras patologías que están afectando el correcto funcionamiento de los riñones.