Los palíndromos o palabras palíndromas, son aquellas expresiones o términos que pueden ser leídos de la misma forma tanto de derecha a izquierda como de izquierda a derecha. Es preciso diferenciarlos de los anagramas, aquellas palabras, sin relación alguna, que usan las mismas sílabas, pero de forma invertida, aunque están estrechamente relacionadas; ejemplo de ello es “gato” y “toga”. Estas expresiones y palabras son bastante comunes en la mayor parte de los idiomas del mundo, siendo, incluso, utilizados por cientos de escritores para enriquecer sus obras y divertir al lector. De igual forma, se caracterizan por involucrar un importante esfuerzo creativo y mental, siendo, incluso, considerado una especie de arte.
Por lo general, los palíndromos mas sencillos son aquellos que sólo son palabras, como Ana, ala, arepera, ananá, oro, reconocer, sometemos, entre muchos otros ejemplos. Otros, incluso, pueden ser de gran extensión, como el fenomenal ejemplo, escrito por Luis Torrent: “Allí por la tropa portado, traído a ese paraje de maniobras, una tipa como capitán usar boina me dejara, pese a odiar toda tropa por tal ropilla”. Existen otros de menos longitud, como el escrito por Julio Cortázar (algunas veces atribuido a Juan Filloy) “Átale, demoníaco Caín, o me delata”. De igual forma, se pueden hallar los semi-palíndromos, aquellas palabras que, al revés, tienen distintos significados, como amor, que puede transformarse en Roma, además de animal y lámina.
En el latín existe un famoso palíndromo, al que se le denominada el cuadrado Sator, conformado por las palabras “Sator Arepo tenet opera rotas”, que puede ser traducido como “el sembrador Arepo guía con destreza las ruedas”.