Radiación

El término radiación proviene del latín radiatio que es la acción y su efecto se traduce como irradiar, esto se traduce como expedir rayos de luz o energía. De manera más científica, se tiene que es una energía ondulatoria de partículas materiales que se dispersan en el espacio.

Hay distintos tipos de radiación, la electromagnética que es aquella donde se propaga la energía mediante la combinación de campos eléctricos y magnéticos que oscilan entre sí. Esto se conoce como espectro electromagnético y se distribuye la energía de las ondas de este tipo que van desde los rayos gamma, hasta las ondas de radio.
Por otro lado, está la radiación corpuscular, la cual consiste en la propagación de partículas subatómicas que viajan a gran velocidad con carácter ondulatorio. De igual forma, está la radiación solar, que son aquellas emitidas por el Sol y determina la temperatura de la Tierra.
Asimismo, se puede encontrar la radiación ionizante, la cual emite energía suficiente para ionizar la materia. Lo que hace es que la radiación ionizante produce iones y extrae los electrones del estado ligado al átomo.
Las máquinas de rayos X y aceleradores de partículas son ejemplos de radiación ionizante. Cabe recalcar que las radiaciones ionizantes producen efectos sobre los seres vivos. Es por ello que suele ser utilizada para tratamientos de radioterapia en oncología para pacientes con cáncer. Este tipo de radiación puede ser dañina, ya que la exposición excesiva a este tipo de radiación puede producir envenenamiento de la división celular.