Spinner

Un Spinner es un dispositivo de mano o juguete simple, con el que las personas pueden interactuar sin hacer demasiado. Un mecanismo giratorio con un centro estable y un disco con dos o tres paletas giratorias, como un ventilador de techo. Se supone que el resultado es relajante y satisfactorio, y los hilanderos realmente buenos pueden moverse por minutos a la vez.

El girador no es más que un pequeño dispositivo que cabe en la palma de la mano y consta de tres hélices con un centro giratorio para girar el juguete. En principio, esa es precisamente la gracia, la hace girar, girar y girar. Y eso es. Sin embargo, la ‘magia‘ de este dispositivo parece consistir en hacer trucos y hacer malabarismos con ella, como si se tratara de un trompo giratorio del siglo XXI.
Los hilanderos se venden en casi cualquier lugar, desde Internet hasta las tiendas del vecindario, desde alrededor de cuatro euros hasta varias decenas, dependiendo del diseño y el material, que puede ser de metal (metal spinners), plástico. con dos brazos o tres y de diseños variados, incluso hay luces led o peligrosas, con bordes cortantes para la estrella ninja. Este juguete fue inventado el 28 de mayo de 1993, fue la creadora la estadounidense Catherine Hettinger de la profesión de ingeniería. Él patentó un llamado «juguete giratorio» con el que simplemente quería encontrar una manera de entretener a los niños.
Según varias versiones, dos eventos fueron los desencadenantes de la invención inicial: el creador explicó en el pasado que el origen principal del juguete proviene de cuando sufre de miastenia gravis, una enfermedad autoinmune que causa debilidad muscular, y no le permitió para jugar con su hija. Más tarde, también dijo que durante su visita a su hermana en Israel vio a niños arrojar piedras a los oficiales de policía y comenzó a pensar en dispositivos que podrían distraer a los niños. Primero, pensó en una piedra blanda que los niños podían arrojar sin consecuencias, pero luego cambió de opinión y desarrolló este juguete.
Él patentó su idea, que pasó desapercibida y unos años más tarde perdió la patente porque no podía pagar el costo de renovarla.
Los expertos dicen que tener algo para ocupar las manos puede ayudar a mejorar la concentración. Sin embargo, este tipo de juguetes giratorios han atraído a la población en general.