El hostigamiento o acoso en el lugar de trabajo comúnmente conocido con el término inglés «mobbing», tiene como objetivo producir miedo, terror, desprecio o desaliento en el trabajador hasta que limita o sea despedido. La Organización Mundial de la Salud (OMS) lo define como el comportamiento agresivo y amenazante de uno o más miembros de un grupo, el acosador, hacia un individuo.
La ley establece que el acoso se entenderá como cualquier comportamiento persistente y demostrable, ejercido sobre un empleado, trabajador por un empleador, un jefe o superior inmediato o mediador, un compañero de trabajo o un subordinado, dirigido a infundir miedo , intimidación, terror y angustia, causar daño laboral, generar desmotivación en el trabajo, o inducir a la renuncia del mismo
Cuando no se atiende a este tipo de evento, puede producir situaciones psicológicas complejas en la persona, o incluso enfermedades causadas por el estrés, como depresión, úlceras, problemas cardiovasculares, problemas sexuales, entre otros.
Ante el comportamiento reiterado de acoso, todos los empleados tienen derecho a presentar su denuncia por presunto acoso en el lugar de trabajo. De acuerdo con el Instituto de Acoso Laboral de los Estados Unidos, el mobbing no se aplica en el caso de una disputa entre dos personas que no están de acuerdo sobre un tema.
Es necesario aprender a diferenciar el acoso o la violencia psicológica continuada de un conflicto laboral aislado, según la OMS, se deben presentar cinco factores:
- Ese no es un evento puntual y dura al menos seis meses.
- Eso es frecuente y sucede, al menos, toda la semana.
- Que hay una víctima específica, es decir, que no se trata simplemente de una situación de un mal entorno de trabajo generalizado.
- Que el acoso sea perpetrado no es una consecuencia de la conducta de la víctima.
- Que la víctima no muestra un trastorno de personalidad previo con un historial de conflicto.
El estudio advierte que este escenario no solo afecta la salud de la víctima, sino también a la empresa en general, ya que está comprobado que un trabajador acosado psicológicamente reduce su desempeño y con ello, la productividad.
En Europa, el acoso en el lugar de trabajo se clasifica como un riesgo laboral y se considera una epidemia. Para la Organización Mundial de la Salud (OMS), habría alcanzado el grado de pandemia que estaría causando varios suicidios, señala el informe.