La sociología lo considera como el proceso por el cual un grupo o un individuo ajusta su comportamiento para incluir su entorno social, para otros grupos, o para una sociedad más grande, a fin de favorecer su existencia o supervivencia. «Es un concepto pasivo, cuando el hombre se adapta o está sujeto a extrañas prescripciones que lo minimizan y sus decisiones ya no le pertenecen.
El aspecto pasivo se revela en el hecho de que el hombre no es capaz de cambiar o transformar la realidad, sino al contrario, se cambia a sí mismo para adaptarse. En ecología, se puede definir como la «propiedad de los seres vivos que les permite subsistir cuando varían las condiciones del entorno o el acuerdo de una estructura con su entorno». Sin entrar en la discusión sobre los significados de la estructura y los medios, y solo a modo de mención diremos que:
Se llama monitoreo del desarrollo de una estructura en interacción con su entorno. Toda adaptación creciente conduce a la modificación progresiva de los dos elementos y, en ese sentido, implica la superación de lo viejo por lo nuevo.
En la adaptación estable a la estructura puede permanecer más o menos sin cambios, pero tiende a descomponerse por la modificación del medio ambiente. En la adaptación decreciente, la estructura tiende a aislar su entorno y, correlativamente, aumenta la diferenciación de sus factores internos.
Vygotsky propone en su teoría que nosotros y el entorno social colaboramos para moldear la cognición de maneras más adaptativas. Tales formas son de origen cultural. La adaptación se centra, por lo tanto, en los aspectos sociales y culturales del entorno y, también, en cómo se interactúa con él.
Lo único que ambos conceptos aceptan es que hay interacción entre el entorno y el individuo. Posiblemente, la clave de adaptación reside más en la interactividad de los componentes que en el individuo o solo en el entorno. De esta forma, se concluye que la adaptación es interacción fundamental.
Desde un punto de vista, las personas se adaptan al medio ambiente. Si tuvieras un perro o un gato, «su» punto de vista se adaptaría a un entorno «humano». El contexto común en el que se mueven es que hay otros seres humanos alrededor. La relación entre las personas que se mueven en el mismo contexto se puede llamar social.