Alegoría

El término alegoría sirve para definir a todo recurso metafórico por el que se busca dar a una imagen o texto, un significado diferente del que asemeja tener de una forma evidente. En la alegoría, el verdadero concepto de un escrito se mantiene oculto a la lectura inmediata, apartándose de la definición exacta del texto.

De igual manera, una alegoría puede manifestarse a través de imágenes o temas artísticos que buscan figurar o simbolizar una idea, apoyándose en formas humanas, de animales o cualquier otro objeto de uso diario. Por ejemplo a la justicia la simbolizan como una dama invidente con una balanza; la muerte viene escenificada por una figura vestida de negro con una hoz en la mano, etc.
Los creadores de alegorías se esfuerzan por describirlas para que todo aquel que las mire pueda entenderlas. Por su naturaleza sugestiva, la alegoría fue muy popular como medio para expresiones de tipo religiosos. Fue muy utilizada desde la época antigua: en la edad media, la antigua Grecia, Roma.
Por medio de las alegorías se busca transmitir conocimientos mediante la aplicación de argumentos analógicos.
Dentro de la poesía la alegoría es muy utilizada, ya que en la mayoría de los casos, comprende la obra en su totalidad. Al emplear imágenes metafóricas, enlazadas todas de una manera tan estructurada y con mucha sutileza, se pretende mostrar una idea compleja o experiencias extraídas de la vida real, que busquen estimular el razonamiento mediante las analogías.
En el contexto de las bellas artes una alegoría es la manifestación de pensamientos abstractos plasmados en figuras que en ocasiones aparecen de forma individual o grupal. De igual manera se toman figuras humanas, su vestimenta, sus gestos, para tratar de manifestar valores sociales, sin que sea necesario el uso de la palabra. Pintores como Botticelli se caracterizan por el uso de alegorías en sus trabajos artísticos.
Para la filosofía, la alegoría es un recurso que se emplea de forma ocasional en algunos textos. Se piensa que el respetado filósofo griego Platón fue el que más utilizó la alegoría, ya que de esta manera podía dar a entender sus ideas.
La alegoría de la caverna es una de las más célebres dentro de la filosofía ya que a través de ella Platón explica su teoría de la realidad y del razonamiento.