Año Trópico

El año trópico o año tropical, como también se conoce, se refiere al tiempo exacto necesario para incrementar la distancia media del sol en 360 grado sobre la eclíptica, es decir el lapso que necesita para completar una vuelta. Tiene un tiempo de duración de 365 días, correspondiente al tiempo solar medio.

Gracias a la nutación y a la precesión de los equinoccios, este espacio de tiempo es diferente al establecido entre dos vueltas consecutivas del sol por el equinoccio de primavera, es decir, cuando pasa dos veces por el llamado “primer punto de Aries”.
Para poder diferenciarlo del año sidéreo se debe tomar en cuenta los equinoccios. Cuando se habla de equinoccio o solsticio, se refiere a un punto de la órbita terráquea, en donde el eje de rotación del planeta se enfila (solsticio) o se ubica (equinoccio) a la línea imaginaria existente entre el Sol y la Tierra. en consecuencia, ese eje (que gracias a la ya comentada precesión de los equinoccios) logra realizar una vuelta en unos 26.000 años sobre la perpendicular a la eclíptica. Es por esto que el año trópico suele ser más corto que el sideral.
Cuando un año trópico transcurre, la recta imaginaria que une a la tierra y al sol no dirige su proyección hacia el mismo punto, es decir hacia la misma estrella, esto se debe a que el eje ya ha hecho parte del giro comentado anteriormente.
Es importante mencionar que el año trópico ha servido de base, para determinar la duración del segundo como una unidad de tiempo internacional, como este año se disminuye 0,53 segundos por cada siglo, se ha acordado tomar como base el valor que tenía en 1900.