Esta palabra hace referencia a aquellos objetos de los que se pueden obtener determinados beneficiosos. De igual forma, se utiliza para hablar sobre la circunstancia en la que se aprovecha o se saca provecho de algo. Esta se encuentra vinculada tanto a las actividades económicas, como aquellas que pueden beneficiar el desarrollo personal, como iniciar un estilo de vida saludable, dándole uso gran parte de los elementos traídos de la naturaleza. Estas ventajas que se obtienen a partir del desarrollo de actividades provechosas, empiezan a llamarse beneficios. En parte, la actitud en la que se busca aprovechar todos los recursos que se tienen disponibles, son las que han colaborado al desarrollo de los seres humanos como civilización.
Desde tiempos inmemoriales, la raza humana ha aprovechado los materiales que tiene a su alrededor para progresar y mejorar su calidad de vida. Esto se evidencia en la elaboración de herramientas de piedras, además de la caza de animales, de los que aprovechaban la piel para cubrirse y el tejido corporal restante lo consumían, pues les brindaba proteínas para que siguieran movilizándose. De igual forma, se le sacó provecho al suelo, con la siembra de hortalizas, vegetales, rutas y cereales, que complementaban la dieta rica en proteínas. De esta forma, se pueden explicar cada uno de los elementos naturales que la humanidad ha utilizado a su favor para ir evolucionado.
En otro contexto, la palabra aprovechamiento puede adquirir un tinte negativo. Esto se debe a que se relaciona con la acción de tomar ventaja por sobre otras personas. Ejemplo de esto es el uso de niños para la realización de actividades riesgosas, como la selección de mica, la materia prima del maquillaje y productos relacionados, cuya extracción es altamente peligrosa, pero que carece de regulaciones apropiadas debido a que las minas se hallan en zonas orientales muy pobres.