Botox se ha consolidado como el equivalente al tratamiento de arrugas dinámicas con toxina botulínica tipo A. Estas son preparaciones farmacológicas de una neurotoxina producida por la bacteria Clostridium Botulinum. Existen diferentes presentaciones de la toxina botulínica tipo A purificada con diferentes tipos de solución y fracción proteica.
El uso de la toxina botulínica en medicina estética se centra en la mejora temporal de las arrugas de expresión del tercio superior de la cara:
- Patas de gallo.
- Arrugas entre las cejas.
- Arrugas en la frente.
- Eleve la cola de la ceja.
La unión neuromuscular (en la conexión entre el nervio y el músculo) su mecanismo de acción ocurre en, inhibiendo la liberación de acetilcolina, que es el neurotransmisor que transporta el impulso nervioso al músculo. Con pequeñas dosis se vuelve muy efectivo, el efecto es la atenuación de la contracción de los músculos que causan arrugas. Dicho efecto depende de la dosis y es reversible.
En manos de expertos médicos hoy en día es un verdadero arte de rejuvenecimiento y embellecimiento debido a la técnica de infiltración de la toxina botulínica que, bien hecho, ofrece resultados muy naturales.
Para aplicar la toxina botulínica de forma adecuada, es necesario que el médico tenga un conocimiento profundo de la anatomía facial, que es el resultado de la contracción de cada músculo y de las características del rostro de cada paciente, así como un entrenamiento adecuado. en la técnica de infiltración, ya que, para obtener resultados naturales, es necesario saber dónde y cuánto se infiltra la toxina botulínica.
En conclusión, podríamos señalar que es una técnica segura, simple, efectiva y mínimamente invasiva que carece de efectos secundarios importantes.
La aplicación de la toxina botulínica, popularmente conocida como botox, es más frecuente en las líneas de expresión del rostro que generalmente aparece entre las cejas, en la frente o el costado de los ojos (patas de gallo), producto de contracciones musculares, explica el Dr. Carlos Echevarría, dermatólogo en la clínica de San Gabriel. Los resultados pueden ser inmediatos o temporales; este produce un alto grado de satisfacción del paciente, ya que permite una expresión y un aspecto tranquilo y relajado, así como la atenuación de las arrugas de expresión. También se puede aplicar en el cuello y el escote.
La toxina botulínica produce una parálisis temporal de un determinado músculo. En el caso de la cara son esos músculos que mueven las líneas de expresión. Si uno pone la toxina botulínica en cualquier músculo del cuerpo, la paralizará «, dice el médico.