Castrati

Castrati (castrato, en singular), es el nombre que se les daba a los cantantes que, para conservar sus voces o rangos vocales agudos, eran castrados. En el idioma español, se les denominaba “capón”, pero actualmente está en desuso y se utiliza el término italiano. La castración consistía en la remoción de los testículos, en aquellos niños que demostraban tener amplias habilidades vocales, para que de adultos mantuvieran la capacidad de generar notas tan agudas como una mujer; esto se debe a que las voces infantiles, por su dulzura, era consideradas más tiernas y, esto, aunado al potencial pulmonar y las habilidades de un hombre adulto, podían originar interpretaciones espectaculares.

Durante la época de auge del Imperio Bizantino, la emperatriz Elia Eudoxia poseía un coro, cuyo maestro y director era un eunuco; cabe destacar que los hombres conocidos bajo ese nombre eran cantores y estaban castrados. Esta práctica se volvería popular con el paso de los años y los eunucos ganaron reconocimiento. Sin embargo, con la caída del Imperio y la toma de Constantinopla, pronto la costumbre desapareció; algunos historiadores, sin embargo, alegan que, tal vez, los castrati sólo fueron opacados por los sopranos falsetistas. No fue hasta el siglo XVI cuando volvieron a tener protagonismo; los castrati eran enviados a rigurosas escuelas de canto, en las que dedicaban horas a la práctica vocal, el estudio de la música y la literatura, además de la memorización de las diversas teorías musicales.
Estos cobraban grandes sumas de dinero por su presentaciones e, incluso, se hizo una reforma en la iglesia a para admitir sólo a castrati en los coros de las iglesias. Muchos provenían de hogares pobres, por lo que sus padres ponían toda su esperanza en ellos al momento de realizar las intervenciones quirúrgicas. Uno de los más famosos y conocidos castrato fue Farinelli, cuyo nombre real era Carlo Broschi, de quien se realizó una película en el año 1994. A pesar de lo aplaudidas que fueron sus voces, con el cambio de gustos por parte de la sociedad, estos perdieron popularidad y dieron paso a una nueva generación de cantores, con características vocales diferentes.