Círculo vicioso, es un argumento circular, que consta de dos partes, cada una de las cuales apoya a la otra. Es decir, cada uno de ellos es verdadero, sólo si el otro es verdadero, es decir, un círculo vicioso es una situación que es insoluble cuando hay dos circunstancias, que son a la vez causa y efecto del otro y que actúan de forma recíproca, dejando ambas sin explicación.
Los círculos viciosos generan aporías (del griego ἀπορία, dificultad para el pasaje), un concepto que se refiere al razonamiento en el que surgen contradicciones o paradojas irresolubles. Por extensión, se denomina círculo vicioso (o vicio) a todas aquellas situaciones perjudiciales cuyas consecuencias retroalimentan, es decir, cuanto más intensas y nocivas son, más fuertes se vuelven.
Para Alex Said Sodá, un círculo vicioso es esa secuencia repetitiva que no tiene principio y fin aparentes y que mantiene un vicio. Si eres consciente de que hay un problema, se debe luchar para tratar de terminar el círculo, es importante pasar por diferentes etapas hasta que se reproduzca una etapa previa, que puede o no tener ciertos cambios.
Debido a sus posibles consecuencias y/o efectos múltiples, puede causar otros círculos viciosos. ya que tiende a aumentar las divergencias. Al mismo tiempo, cuando uno de sus elementos básicos llega a su fin, el círculo vicioso se autodestruye.
Sodá ilustra este punto con un ejemplo de una bola de nieve, que crece mientras sigue rodando, pero finalmente choca con un obstáculo insalvable y se deshace.
Lo opuesto a un círculo vicioso es un círculo virtuoso, es decir, una situación deseable que se mantiene a través de la virtud. La novela anónima «El lazarillo de Tormes» contiene una descripción magistral de lo que es un círculo vicioso (en este caso, de desconfianza y cascada de paranoia) en el paso de las uvas:
«Sucedió que, al llegar a un lugar llamado Almorox, mientras recogían uvas, un recogedor de uvas les dio un montón de limosnas. Accedió a hacer un banquete, para que yo no pudiera tomarlo como para contentarme: ese día me había dado muchas rodillas y golpes, sentémonos en una cerca y dejémoslo. Para salir de un círculo vicioso sólo se requiere de voluntad y apoyo”.