Cliente

El término cliente proviene del latín y se describe como la persona o entidad jurídica que se beneficia de otro ente para un bien común. Este término se utiliza desde mucho tiempo atrás, en la antiguas civilizaciones un tipo de personas de mayor jerarquía recibía servicios de un grupo de menor posición y este es el principio de la definición.
Los estudios de marketing utilizan este término para referirse a las personas que adquieren algún producto, por ejemplo las cadenas de supermercados la utiliza a diario para ellos el cliente es solo un numero de registro.
Todas la entidades empresariales tiene el futuro de sus empresas puestas en los clientes. Una empresa puede catalogar y clasificar a sus clientes de acuerdo a muchos factores:
Cliente potencial: es aquel compra o requiere los servicios de otra empresa de manera muy seguida estos clientes por lo usual son acreedores de un crédito que no es más que un plazo de días después de haber recibido la mercancía o el servicio.
Cliente promedio: este tipo de cliente es el que adquiere de manera regular esto puede suceder porque el cliente no satisface sus intereses en un solo proveedor y tiene que recurrir a varias entidades.

Clientes eventuales: son aquellos que compran muy espontáneamente ya sea porque ellos mismos fabrican lo que necesitan o porque simplemente no tienen muchas necesidades.
Si partimos de las necesidades diarias absolutamente todas las personas somos clientes de otra empresa y siempre vamos a necesitar ser atendidos.