Debido Proceso

El debido proceso es uno de los principios básicos en el ámbito jurídico, frecuentemente utilizado en el derecho procesal y el cual se encuentra establecido como como un pilar en las cartas magnas de la mayoría de los países de características democráticas. Este establece que un individuo cualquiera debe gozar por derecho de un juicio antes de que se le asigne cualquier tipo de condena, todo esto con la única finalidad de garantizar que dicho juicio tenga un resultado ecuánime, permitiendo que el acusado pueda defenderse al ser escuchado por un juez, para así hacer valer su derecho.

Éste es frecuentemente utilizado en diferentes tipos de procesos legales, sin embargo es en el derecho penal y en sus respectivos procesos en donde cobra mayor importancia. En la mayoría de los países del mundo, es el gobierno quien controla a los organismos de orden público, con el fin de evitar o reprimir las acciones delictivas, además de ello el Estado es también quien tiene el poder de sancionar o en su defecto perdonar a los acusados por haber cometido o no algún delito.
Uno de los antecedentes históricos emblemáticos en donde el protagonista fue el debido proceso, fue en una declaración en la Carta Magna del rey Juan I, en 1215 en donde se le quitó una porción del poder de los reyes al incluir en dicha carta al debido proceso. A través de la historia los hechos han demostrado que el debido proceso no siempre fue aceptado, esto se puede ver desde el primer momento de su integración en la Declaración de los Derechos Humanos y del Ciudadano por la autoridad que poseían los reyes en el año de 1789, ya que para ese entonces dicho nombramiento.
El debido proceso surge como respuesta a una necesidad, debido a que históricamente los gobiernos se emplean de diversas herramientas u organismo como lo es el actual Poder Judicial, para así poder controlar y decidir todo lo referente a la interpretación de la ley, su quebrantamiento y su posterior castigo, es por ello que se crea el debido proceso como un salvaguardo a un posible acusado, asegurándose de que toda sentencia realizada por un juez deba haber atravesado por un proceso legal previo, el cual velará porque se cumplan con todos los privilegios por igual en todas las partes que involucra dicho proceso.