Deísmo

Este concepto de deísmo es equivalente al del teísmo, es decir, cualquier doctrina que sostiene que Dios existe y, por lo tanto, se opone al ateísmo. De hecho, tanto el deísmo como el teísmo comparten la idea de Dios como el principio creativo.

El deísmo como una corriente filosófica comenzó en Francia en el siglo XVIII, también conocido como el siglo de la luz. Para los deístas, los conceptos de pecado, milagro o redención no tienen ningún papel en la comprensión de la idea de Dios.
Desde un punto de vista filosófico, el deísmo es un intento de combinar la razón humana y la existencia de un Dios creador. El deísmo se conecta con tradiciones religiosas como el hinduismo o el budismo, porque en ambos hay un orden del universo similar a la concepción de los deístas. Por lo tanto, para un budista, la existencia del mal se relaciona con la falta de armonía espiritual en cada individuo (recuerde que para un cristiano el mal es una consecuencia del pecado original).
Por lo tanto, los deístas creen en Dios pero no en las prácticas y dogmas religiosos. El deísmo reconoce que Dios creó el universo aunque no cree en su intervención posterior para orquestar su destino.
Para los deístas, no hay milagros ni la Santísima Trinidad. La manifestación de Dios se produce a través de leyes naturales, que pueden analizarse desde la ciencia. En general, el deísmo acepta de una manera racional que no se puede demostrar que Dios existe ya que el acto de creer, en última instancia, es una cuestión de fe.
El deísmo no concuerda con las afirmaciones más importantes de las religiones, y las cuestionan una y otra vez ante la falta de respuestas satisfactorias por parte de sus dogmas. Algunas características características de los deístas son las siguientes:
El deísmo no acepta que la existencia de Dios haya sido completamente representada o explicada en las escrituras generalmente llamadas sagradas; Su reflexión sobre las características de Dios usa la razón y no permite que una doctrina imponga una serie de conceptos inamovibles; En cuanto a la ética, tratan de ser guiados por su propia conciencia y su razonamiento al tomar decisiones importantes, en lugar de seguir las reglas impuestas por las instituciones; Encuentran o buscan espiritualidad a través de caminos espontáneos e inexplorados, a diferencia de aquellos que adoptan una tradición; Se los considera religiosos, para describir su relación con Dios; No creen en las supersticiones desde su punto de vista; contaminar ciertas enseñanzas religiosas y rescatar los aspectos racionales que pueden ser verdaderamente útiles para la vida de cualquier persona, religiosa o no.