Se conoce como empoderamiento, al proceso por el cual un individuo, comunidad o grupo social está dotado de un conjunto de herramientas para aumentar su fuerza, mejorar sus capacidades y aumentar su potencial, todo esto con el objetivo de mejorar su situación social, política, económica, psicológico o espiritual
Este concepto ha permitido que los individuos y las sociedades que hasta ahora fueron marginados del proceso de toma de decisiones sean ahora el eje central de las intervenciones. Sin embargo, diversos obstáculos como la falta de una definición de consenso y el limitado trabajo empírico relacionado con este enfoque han impedido que las políticas de cooperación internacional incorporen adecuadamente esta terminología.
El empoderamiento está dirigido a grupos que, por diversas razones, se encuentran en estado de vulnerabilidad. Los proyectos que promueven el empoderamiento buscan mejorar la autoestima y proporcionar recursos simbólicos y / o materiales a quienes se encuentran en una posición desfavorable y así lograr un cambio positivo en sus vidas.
Asimismo, a nivel individual, el empoderamiento se refiere a la importancia de que las personas desarrollen habilidades para que puedan afirmar su rol y mejorar su situación en términos de derechos sociales y políticos, así como en relación con la actividad económica y productiva.
También es común hablar sobre el empoderamiento de los jóvenes y los ancianos. En este marco, se pretende que los miembros de estos grupos de edad tengan las herramientas necesarias para desarrollarse según sus capacidades sin depender de otras personas.
El empoderamiento de los pueblos aborígenes, por otro lado, está orientado para que estas comunidades puedan progresar económica y socialmente sin renunciar a su cultura y sin depender del bienestar.
Finalmente se puede decir, que por otro lado el desempoderamiento es el resultado de procesos destructivos para el individuo y la sociedad que pueden suceder repentinamente de forma traumática o provenir de estructuras de poder arraigadas por un largo tiempo en una cultura.