Esquizofrenia

El origen etimológico de la palabra esquizofrenia es del griego σχίζω (skhizō) que significa dividir, picar o segmentar y φρήν (phrēn) cuyo significado es mente o alma. Lo que nos indica que la esquizofrenia es picar o dividir la mente en dos. Pero no es algo que ocurra a gusto y placer, la esquizofrenia es una enfermedad mental, quien la padece literalmente tiene la mente segmentada en dos partes de las cuales con una de ellas asocia las cosas reales y en la otra parte de la mente imagina y almacena en ella cosas que no existen, es decir, crea un mundo imaginario.

El término esquizofrenia es empleado para darle nombre a una enfermedad mental, se considera un grave y preocupante trastorno psiquiátrico debido a que la psiquis de la persona que presenta esta enfermedad no funciona de manera normal, y es porque su conciencia va dirigida en parte a una situación que no es real. Estos trastornos psicóticos se caracterizan por presentar alucinaciones o delirios mentales que se presentan a través de oír voces (muchos esquizofrénicos lo describen como “oigo voces en mi cabeza”), además de ver y también sentir cosas que no existen, es decir, a través de los sentidos sensoriales perciben diferentes situaciones imaginarias, como consecuencia de esto presentan conversaciones erradas e incoherentes y una gran cantidad de comportamientos que no tienen sentido ni razón de ser; en ocasiones la justificación que le dan a su modo de actuar es que indican que sus alucinaciones (amigos imaginarios, si así se quiere ver), los mandan a hacer esas cosas, de algún modo los gobiernan, y generalmente son actos violentos que pueden afectar a alguien más.
El porcentaje de individuos que presentan esta enfermedad es relativo, debido a que lo manifiesta 1 de cada 100, en la mayoría de las veces suelen aparecer los síntomas durante la adolescencia aunque existen algunos pocos casos donde ha ocurrido un diagnóstico en la niñez de la persona, como es el caso de la niña Jani Schofield, diagnosticada con esquizofrenia a los 7 años de edad.
A medida que la enfermedad va avanzando los individuos suelen presentar otros síntomas como, disminución del habla debido a que olvidan muchas palabras, retraimiento social, es decir, se encierran en sí mismos, porque no confían en nadie más, muchas veces creen que aquellos que los rodean están en su contra y quieren ocasionarles algún daño, otros síntomas son la indiferencia emocional e inhibición psicomotriz. A pesar de los estudios realizados no se ha podido detectar un origen exacto de la enfermedad ni un cura, sin embargo existen tratamientos y terapias que ayudan a que el individuo tenga una mejor calidad de vida.