Cuando algo resulta ser inusual o no es habitual, decimos que es extraordinario. Su presencia en la oficina tan temprano en la mañana es realmente algo extraordinario.
La palabra en cuestión tiene una variedad de sinónimos entre los que destacan: excepcional, impresionante y sorprendente. Si algo o alguien se aleja de lo común o sucede algo muy a menudo, se dirá que es excepcional. Juan es un hombre excepcional, trabaja y también ayuda en casa con las tareas domésticas.
Puede decir de cierta manera que lo extraordinario es singular, y lo singular, lo extraordinario; porque lo que es único, único, diferente del resto, está necesariamente separado del orden común, y lo que está fuera del orden común, por precisión tiene que ser solo, único y diferente del resto. Pero usamos una u otra palabra de acuerdo con la forma en que la consideramos y la preferencia que le demos.
Por otro lado, cuando algo nos causa una impresión enorme, más bien de admiración o asombro, diremos que es impresionante. La puesta en escena de la obra es impresionante.
Esta palabra se aplica en varios campos: hablamos de enfermedades extraordinarias (que ocurren raramente), de vacaciones extraordinarias (cuando solo se establecen en alguna ocasión especial, por ejemplo, cuando se celebra el centenario u otro aniversario significativo de una batalla) o de facultades extraordinarias, otorgadas a algún funcionario, para aumentar su poder en tiempos de crisis.
En este último sentido de poderes extraordinarios, podemos mencionar los dados en la Antigua Roma a ciertas magistraturas, llamadas extraordinarias, porque no siempre funcionaron, como en el caso de la dictadura que en la época republicana, aseguró el desarrollo institucional normal, en casos de peligro interno o externo. El dictador se abroga todos los poderes del Estado, pero por un tiempo limitado, nunca más de seis meses.
En el campo de la prensa se llama extraordinario a esa edición especial que el medio decide publicar como resultado de un evento excepcional que capta la atención de la opinión pública. Por ejemplo, la asunción del nuevo Papa y la condición especial de que es el primer Papa latino motivó la edición de numerosos números extraordinarios en todos los periódicos.