Extruir

Se conoce como extruir al proceso mediante el cual se elaboran objetos seccionados de manera transversal con segmentos fijos y bien delimitados.
Para lograr el objetivo descrito, el material se empuja o se extrae haciendo uso de un troquel de una porción transversal predeterminada.
Hay que señalar que este proceso posee dos ventajas fundamentales, en comparación con otras labores propias de la manufacturación. La primera es la capacidad de elaborar secciones transversales que en otros casos serían muy dificultosas de conseguir. Mientras que la segunda es que permite trabajar a base de materiales poco resistentes, porque éste sólo consigue fuerzas de cizallamiento y compresión.
Asimismo, se debe mencionar que, gracias a la extrusión, se obtienen piezas finales que se estructuran a partir de una terminación superficial con características que rayan en la excelencia.
Cabe destacar que la extrusión se produce de dos maneras: una es la continua, a través de la cual se crean objetos largos; y la otra es la semicontinua, en cuyo caso se genera una diversidad de partes.
En este proceso la manipulación industrial de los materiales se realiza independientemente de la temperatura en la que se encuentren, es decir, pueden estar tanto fríos como calientes.

Los materiales que con mayor frecuencia son sometidos a la extrusión son los polímeros, las cerámicas, los metales, el hormigón y una gran variedad de artículos alimenticios.
Para finalizar, hay que referir que Joseph Bramah patentó el primer proceso de extrusión en el año de 1797, el cual se llevaba a cabo por medio del precalentamiento del metal para, posteriormente, hacerlo atravesar un troquel mediante un émbolo concebido para trabajarlo de manera manual.