La fecha de caducidad está vinculada al verbo expirar, que alude a estropearse o desaparecer con el paso del tiempo. Lo que expira sufre la pérdida de sus cualidades o su condición. Los alimentos, medicamentos, productos químicos o cosméticos presentes en sus envases tienen una fecha de vencimiento que es el día límite para un consumo óptimo desde el punto de vista sanitario.
Por otro lado se puede decir, que una fecha de vencimiento tiene como finalidad indicar a un individuo el tiempo límite o estipulado por las partes para cumplir con las diversas obligaciones contractuales, ya sea por alguna liquidación económica, un pago o algún financiamiento. Tomando en cuenta que legalmente la forma de extinción de un derecho o una acción con un plazo determinado es considerado expiración de tiempo, un ejemplo es una póliza de seguro que estipula el derecho del asegurado a expirar si causa la pérdida en Forma deliberada) Y no puede ser suspendido o interrumpido como sucede con la prescripción, y también a diferencia, funciona incluso sin la solicitud de una parte (ex officio).
Cabe señalar que en alimentos y bebidas, además, puede diferenciar la fecha de consumo preferencial o la fecha de duración mínima, que es el tiempo durante el cual estos productos conservan correctamente sus cualidades sensoriales. Es la fecha indicada por el fabricante en el momento en que el alimento mantiene intactas sus propiedades organolépticas (olor, sabor, textura, etc.) sin que su ingesta posterior represente un riesgo para la salud. Se usa en productos alimenticios que pueden almacenarse por más tiempo (como cereales, arroz o especias). Algunos consideran que no es peligroso para la salud consumir productos vencidos pero es importante señalar que algunos individuos pueden reaccionar con alergias e intoxicaciones.