Fútbol Americano

El fútbol americano nace aproximadamente 100 años en los Estados Unidos. Y es uno de los deportes de contacto más competitivos del mundo donde el jugador requiere una gran disciplina, entrenamiento físico y preparación mental. El deporte también goza de una alta actividad profesional en México y en algunos países de América Latina, aunque en menor escala.

En Europa, comenzó a desempeñar un papel principal en 1987, cuando se creó la Federación Europea de Fútbol (EFAF). La práctica de este deporte comenzó a desarrollarse en las universidades estadounidenses en los últimos años del siglo XIX. El creador de algunas reglas de este juego fue Walter Camp, de la Universidad de Yale, que variaba la práctica habitual del rugby, mezclando ciertos conceptos del fútbol europeo o inglés, el llamado fútbol en los Estados Unidos. De esta forma, nace el fútbol americano.
Es un deporte de fuerte contacto físico entre los diferentes jugadores. Los jugadores en el campo de fútbol americano se componen de 11 jugadores cada uno, como en el fútbol europeo, que en un juego se enfrentan 11 contra 11. Sin embargo, se puede decir que pueden jugar hasta un máximo de 45 jugadores intercambiables para cubrir los 11 posiciones en el campo.
El fútbol americano consiste en cuatro cuartos de 15 minutos, con un descanso después de los dos primeros. Se juega en una cancha de 100 yardas de largo y 52 yardas de ancho. El partido comienza con un puntapié inicial de uno de los dos equipos, según lo determinado por una rifa anterior.