Glóbulos Blancos

Responsables de llevar a cabo la respuesta inmune Los glóbulos blancos o leucocitos son las células sanguíneas que actúan en defensa del cuerpo contra antígenos y sustancias extrañas. Los leucocitos, junto con los glóbulos rojos y las plaquetas, forman el conjunto de los elementos formados de la sangre.

Es decir, la respuesta inmune o el sistema inmune actúa dentro del cuerpo identificando las células patógenas y cancerosas que dan paso a enfermedades del cuerpo. Este sistema es capaz de distinguir una gran variedad de agentes infecciosos como parásitos intestinales o virus, entre otros. Está compuesto principalmente de glóbulos blancos.
Hay cinco tipos de leucocitos: neutrófilos, linfocitos, monocitos, eosinófilos y basófilos.

  • La defensa del cuerpo contra las bacterias y las infecciones por hongos son llamadas neutrófilos. Alrededor del 45% al ​​75% de los leucocitos en la sangre son neutrófilos. Un valor bajo es uno que está por debajo de 1000 por microlitro.
  • Los linfocitos representan del 20% al 40% de los glóbulos blancos. Cuando este valor cae por debajo de 1,500 por microlitro, puede no haber síntomas, pero el riesgo de infección aumenta. Los monocitos constituyen una pequeña fracción de leucocitos, del 1% al 10%. Un nivel saludable varía de 200 a 600 partes por microlitro.
  • Entre un 6 o 7% de leucocitos en la sangre son llamados eosinófilos. Un nivel bajo puede no causar síntomas específicos.
  • Los basófilos pueden variar de 0 a 300 partes por microlitro.

Cabe señalar que los glóbulos blancos se generan tanto en el tejido linfático como en la médula ósea. La médula ósea es un tipo de tejido dispuesto dentro de los huesos largos, las costillas, el esternón, las vértebras, la pelvis, la cintura escapular y los huesos del cráneo. Mientras que el tejido linfático es esa estructura que transfiere un líquido transparente (linfa) al corazón.
Para contar los glóbulos blancos, la sangre se extrae de una vena, generalmente de la parte interior del codo o del dorso de la mano. El sitio se limpia con un desinfectante (antiséptico). El médico envuelve una banda elástica alrededor de la parte superior del brazo para aplicar presión en el área y hacer que la vena se llene de sangre. Luego, el médico introduce suavemente una aguja en la vena y recoge la sangre en un vial hermético o en un tubo conectado a la aguja. La banda elástica se retira del brazo. Una vez que se ha recolectado la muestra de sangre, se retira la aguja y se cubre el sitio de punción para detener cualquier sangrado.