Es una forma de gobierno en la que el país se considera un «asunto público» y donde las oficinas de Estado son elegidas o designadas, en lugar de heredar. Es un gobierno donde el jefe de estado no es un monarca y los líderes del gobierno ejercen el poder según el estado de derecho. En los tiempos modernos, la definición de republicano se refiere comúnmente a un gobierno en el que los individuos elegidos representan el cuerpo ciudadano (una república democrática).
El republicanismo es una filosofía política orientadora de los Estados Unidos. Ha sido una parte importante del pensamiento cívico americano desde su fundación. Hace hincapié en la libertad y en los derechos individuales inalienables como valores centrales, haciendo a la gente soberana como un todo, rechaza la monarquía, la aristocracia y el poder político heredado, espera que los ciudadanos sean independientes en su desempeño de deberes cívicos y rebaje la corrupción. El republicanismo americano fue fundado y practicado por los Padres Fundadores en el siglo XVIII. Para ellos, según un equipo de historiadores, «el republicanismo representaba más que una forma particular de gobierno, era un estilo de vida, una ideología central, un compromiso intransigente a la libertad y un rechazo total de la aristocracia».
Las repúblicas se hicieron más comunes en el mundo occidental a partir de finales del siglo XVIII, desplazando finalmente a la monarquía absoluta como la forma más común de gobierno en Europa. En las repúblicas modernas, el ejecutivo está legitimado por una constitución y por el sufragio popular. En su obra «El Espíritu de las Leyes», Montesquieu clasificó a ambas democracias, donde todas las personas tienen una participación en el gobierno, y las aristocracias, donde solo algunos gobiernan como formas republicanas de gobierno.
La mayoría de las veces una república es un solo estado soberano, pero también hay entidades estatales sub-soberanas que se denominan repúblicas, o que tienen gobiernos que se describen como «republicanos» en la naturaleza. En contraste, la Unión Soviética fue constitucionalmente descrita como un «estado multinacional federal», compuesto de 15 repúblicas, dos de las cuales, Ucrania y Belarús, tenían sus propios puestos en las Naciones Unidas.
A partir de 2017, 159 de los 206 estados soberanos del mundo utilizan la palabra «república» como parte de sus nombres oficiales; No todas son repúblicas en el sentido de tener gobiernos elegidos, ni todas las naciones con gobiernos electos usan la palabra «república» en sus nombres.