Gripe

También conocida como gripa o influenza, la gripe se define como una patología de tipo infecciosa, que se transmite entre aves y mamíferos y que es originada por una clase de virus de ARN, perteneciente a la familia de los Orthomyxoviridae.
Los términos gripe y gripa, las cuales se refieren a la misma enfermedad, provienen del término francés Grippe, el que a su vez deriva del suizo-alemán Grupi, cuyo significado es “Acurrucarse”.
Por otro lado, el vocablo Influenza tiene su origen epistemológico en el italiano.
En el caso de los seres humanos, la gripe causa afectación en las vías respiratorias y en su etapa inicial puede presentar la misma sintomatología de un resfriado.
Los síntomas generales de esta enfermedad son: dolor de garganta, debilidad y agotamiento físico, dolores musculares, articulares, estomacales y de cabeza. También es común que el engripado padezca de una tos seca y sin mucosidad, malestar en todo el cuerpo y, en algunos casos, es frecuente la elevación intermitente de la temperatura corporal.

Cuando no es tratada de manera adecuada y oportuna, la gripe podría convertirse en un padecimiento más grave, como la neumonía, cuadro clínico que en ocasiones conduce a la muerte, especialmente si los pacientes son infantes y, sobre todo, personas de la tercera edad.
Pese a que muchos la confunden con el resfriado o catarro, la gripe es una patología más complicada y su procedencia está vinculada a una clase de virus diferente.
Es de hacer notar que esta enfermedad se transmite desde individuos infectados por medio de las secreciones nasales, bronquiales, o la saliva, en las que viajan cargas importantes del virus hasta alcanzar a otro sujeto.