La historia universal es un recuento de los eventos más importantes que la humanidad ha experimentado hasta el día de hoy. También trata de dar cuenta de la forma en que estos eventos relevantes se desarrollan y relacionan, tratando de dar una explicación conceptual de ellos. Para lograr una explicación lo más didáctica posible, es habitual hacer divisiones que se refieran a diferentes etapas.
Esta división debe entenderse como un consenso entre los historiadores que se debe fundamentalmente al hecho de agrupar eventos en grandes bloques que tienen mayor poder explicativo. Cada período anterior se describe a menudo como prehistoria, un momento en el que, aunque puede haber habido eventos importantes, carecen de un registro preciso ya que la palabra escrita puede reflejar; cuando termina, y comienza la Edad Antigua. Que se refiere al comienzo de las primeras civilizaciones, generalmente a orillas de los grandes ríos. Con la caída del Imperio Romano de Occidente, en esta etapa se considera sellada y se hace referencia a una nueva etapa: la Edad Media.
La Edad Media, en el otro lado, se caracterizó por el desarrollo del cristianismo en toda Europa y un sistema de producción y organización social llamado feudalismo. Consistió en un convenio entre feudales, vasallos y hombres libres ya que mediante dicho trato el primero contribuye con sus tierras y el segundo con contribuir a una parte de lo que produjo el trabajo de ellos. Además, se comprometieron a defenderse contra algún tipo de invasión.
La Edad Moderna, por otro lado, comienza con la caída del Imperio Romano de Oriente. Es en esta época donde sale a la luz el continente Americano y comienzan conformarse las ideas políticas y económicas que estimulan la importancia de obtener libertad. Culminaron con la llamada Revolución Francesa, concluyendo esta tercera etapa en la que se divide la historia.
La realidad de hoy es que el capitalismo se ha convertido en el principal protagonista o ha sido indispensable en algunos países para mantener una organización económica con características sociales. En estos hechos se llevó a cabo el ensayo de Francis Fukuyama que se enfatiza y explica el fin de la historia, donde predomina y se mantiene la democracia como única opción.