Hueso Temporal

Los huesos temporales se sitúan en la región inferior lateral del cráneo, entre el occipital, el parietal y el esfenoides, distinguiéndose en ellos tres porciones; Porción Escamosa, es aplanada lateralmente en forma de círculo irregular, que contribuye a formar la bóveda craneal. Porción Mastoidea, es la que presenta en su interior cavidades de contenido aéreo, las celdillas mastoideas. Porción Petrosa o Peñasco, que alojan en su interior los órganos del oído y del equilibrio.

Es un hueso par, que articula con el hueso molar, con el ala mayor del esfenoide, y va hacia arriba articulando con el parietal, hacia atrás con el hueso occipital y hacia abajo articulando con el hueso maxilar inferior; por medio de la articulación temporomandibular, deriva de cinco puntos: una porción mastoidea, la porción de la escama del temporal, una porción tubular o apófisis zigomática, donde se une a la cavidad glenoide, el conducto auditivo externo y la porción petrosa o peñasco del temporal.
En su parte interna encontramos el borde superior del peñasco, que presenta cuatro caras; La cara antero superior, que en ella se destacan cuatro elementos anatómicos importantes, que son: una eminencia ovoidal, que es la eminencia arcuata, una lámina cuadrilátera, llamada tegme tímpani, que corresponde a la caja del tímpano, los hiatos de falopios, por donde pasan los nervios petrosos y el cavun de meckel, donde se deposita el ganglio de gasser. La cara postero superior, donde se encuentra el conducto auditivo interno y el acueducto del vestíbulo. La cara postero inferior, donde se encuentra el orificio del conducto carotidio, por donde pasa la arteria carótida interna, la fosa yugular, la apófisis de la estiloide, el agujero estilomastoideo , por donde pasa el nervio facial. La cara antero inferior donde se encuentra la porción no articulada de la cavidad genoidea.