Impío

El vocablo impío es un adjetivo utilizado para referirse a la falta de fe, a lo dañino o perverso. Por lo tanto un impío es aquel que no cree en Dios y no guarda respeto hacia lo sagrado. Es importante mencionar que no sólo el ateo es impío, también lo es aquel sujeto cruel y sin piedad.

Como se puede observar este término, presenta un sentido negativo, relacionado con la maldad. La falta de fe en Dios, hace que el impío no cuente con más ley, que la que el mismo establece, por lo tanto se deja dirigir por ellos y como consecuencia lo convierte en un ser soberbio, violento y lleno de toda clase de defectos vinculados a la condición humana.
Unos de los actos impíos más significativos es el no creer en Dios. En la época antigua esto era considerado como un delito grave, por lo que se castigaba con la muerte a aquellos que osaban irrespetar a los dioses. Para los griegos un impío era aquel o aquellos que atentaban contra las costumbres religiosas, las cambiaban o las negaban, realizaban acciones violentas en contra de los sacerdotes o hurtaban objetos de lugares sagrados.
En los textos bíblicos mencionan que aquel que humano impío, que no considere arrepentirse de corazón de todos sus pecados, será castigado, permaneciendo en el infierno durante la eternidad. Según la iglesia católica, existe un lugar llamado purgatorio, en donde el alma de los impíos permanece hasta que se encuentre totalmente purificada y pueda ascender al cielo. Por lo que el purgatorio es la oportunidad que tiene los impíos en transformarse en seres de piedad.
Actualmente este término solo es manejado exclusivamente dentro del ámbito religioso.