Lepra

La lepra es una enfermedad bacteriana infecciosa caracterizada por la destrucción de la piel y las membranas mucosas, así como la participación de las células nerviosas. Sin tratamiento, puede causar las mutilaciones y discapacidades conocidas de los leprosos. Para el año 600 aC Esta enfermedad ya era conocida y hasta los años cuarenta fue la única intervención que puede transformarse en el aislamiento de personas infectadas en las colonias por leprosos.

A principios del siglo XX, se descubrió el origen infeccioso de la lepra y se identificó su agente causal, llamado Mycobacterium leprae, que permite el desarrollo de fármacos capaces de combatir y que significa un esquema de tratamiento efectivo en los años ochenta.
La lepra se presenta en diferentes formas que difieren por su gravedad y por sus síntomas y formas extremas:

  • lepra lepromatosa contagiosa (también llamada lepra multibacilar).
  • lepra tuberculosa o tuberculosa.

No es muy contagioso y tiene un período prolongado de incubación (tiempo antes de que aparezcan los síntomas), lo que hace que sea difícil saber cuándo y cuándo alguien contrajo la enfermedad. Los niños son más propensos que los adultos a obtenerlo.
Algunos expertos consideran que esta bacteria puede llegar a propagarse al inhalar pequeñas gotas de saliva en el aire por una tos o estornudo de una persona con lepra. Esta bacteria puede ser transmitida también mediante el contacto con fluidos nasales de una persona contagiada. La lepra puede presentarse en dos formas muy comunes que son; Lepromatosa y tuberculosa, estas se encuentran formadas por úlceras en la piel. Sin embargo, la forma lepromatosa es más seria.
En países con climas templados y tropicales es bastante común esta enfermedad. En los Estados Unidos, aproximadamente 100 casos son diagnosticados cada año. La mayoría de los casos ocurren en el sur, California, Hawai y las islas de ese país, y Guam.
Cabe señalar que la leprosaria era profunda y extensa, conectada con cuevas naturales en las que los pacientes debían pasar las 24 horas del día. En esas cuevas, sus pequeños refugios estaban armados. Cuando una persona contrae la lepra, fue llevada a este lugar de aislamiento, despidiéndose de sus seres queridos para siempre, que estaba a cargo de la provisión de provisiones.