Moderación

La Moderación es un término ambiguo según su etimología deriva del latín “moderari” que señala lo que se mantiene en los “límites intermedios”, o sea en una situación de equilibrio que quiere decir controlar lo excesivo. Una persona puede moderar el consumo de alguna bebida o de un alimento, al mismo tiempo que puede tener moderación a la hora de realizar gastos.

Es una palabra que se puede usar en cualquier situación. El otro uso que se le da a la palabra es para describir la mesura y prudencia de una persona al realizar cualquier acción. Se le considera a la moderación una virtud pues las personas que practican este modo de vida aportan para la sociedad buenas costumbres y una visión de la prosperidad con la que no buscan dañar a nadie para obtener beneficios propios. Las personas que son moderadas todos los aspectos de su vida tienden a tener más equilibrio y tranquilidad. La moderación en la economía es una herramienta con la que las personas pueden administrar los recursos que entran al núcleo financiero, dando oportunidades al ahorro.
En algunas profesiones es importante moderar nuestras habilidades para crear un entorno funcional entre los compañeros de trabajo. El equilibrio en un ambiente laboral es fundamental para que cada persona desarrolle sus habilidades adecuadamente. En la cocina por ejemplo, cada quien tiene una tarea y es importante definir una jerarquía para que se moderen las acciones de cada persona en el área. De esta forma una sola persona es la que modera las órdenes mientras las demás son las que ejecutan las tareas.