Origen de la letra B

La procedencia antigua de la b se encuentra en los jeroglíficos egipcios donde se pudo observar un pictograma simbolizaba una casa. Posiblemente se trataba de una construcción, con puertas y paredes. Un dibujo encontrado da un espacio a la letra fenicia para el fonema “beth”. La letra b hacia la izquierda porque los fenicios escribían en sentido contrario de derecha a izquierda. La escritura fenicia se distinguía de las otras porque no reproducía unos ruidos individuales, sino fonemas completos.

La letra b se encuentra de segunda en los alfabetos tanto en el español como en el latino básico y es la primera de sus consonantes. El sonido de la B es el mismo para la letra V, la fuente de esta sincronía se encuentra en la historia de la pronunciación y la escritura nuestro idioma. En el latín los grafemas reproducían en su inicio sonidos diferentes, la letra “v” se hablaba de manera semejante a nuestra “u”, sin embargo rápidamente comenzaron a mezclarse los sonidos de las dos letras la “b” y la “v”. Por ejemplo la palabra codicia que en latín es “cupiditia” y codo en latín se escribe “cubitus”, estas son dos palabras con raíces latinas que trascendieron al antiguo español.
En el lenguaje español al igual que en la gran mayoría de los idiomas que utilizan el abecedario latino y el abecedario fonético universal, la letra “B” orienta a un fonema bilabial cerrado resonante. Aunque permanezca la costumbre de escribir “B” y “V”, desde el siglo XV estas letras tienen una falta de diferenciación en el español, las dos son habladas con sonido bilabial esta rareza es conocido como betacismo.
En determinados hablas del español, exclusivamente en América Latina, la “b” intervocálica se habla labiodental cuando tiene énfasis. Estas labio dentalizaciones de la “B” y la “V” ortográficas no son ningún antiquísimo oral ni argumenta a la remota creencia diferenciadora del español preclásico. Excepto a una ejecución alofónica del sonido de la “B”.
En el inglés así como en el español, se expresa un sonido de obstrucción bilabial resonante, pero se vocaliza más firme que en el español.