El término de “persona non grata” viene dado solo a nivel jurídico y diplomático. Se usa para determinar que una persona con el cargo que sea, no es aceptada en un país en particular. Muchos diccionarios definen el concepto como “persona no aceptable”, Aunque son palabras diferentes en sus aplicaciones no tiene variación.
Los embajadores y gobiernos usan este recurso cuando se sienten amenazados por esa persona en particular, o cuando la misma atenta contra las costumbres del lugar. Por otra parte, una persona declarada “non grata” por un país puede apelar dicha sentencia con la corte internacional de justicia.
Cuando un gobierno recibe el aviso de “persona no grata” está en todo su derecho de cortar relaciones diplomáticas, para así, solventar la falta o el agravio que éste ocasionará.
Declarar a alguien “no aceptable” es un arma de doble filo para cualquier gobierno, ya que si bien se libran de una posible amenaza puede alterar sus relaciones diplomáticas no solo con el país de origen de la persona, sino que también con cualquier otro país aliado, que en solidaridad, deciden cortar relaciones con el país emisor de dicho comunicado.
El derecho diplomático, constituye un conjunto autosuficiente de normas que por un lado otorga una serie de privilegios e inmunidades a las misiones diplomáticas y por el otro previendo la posibilidad de su abuso por parte de los miembro de dichas misiones, especifica los medios a disposición del estado receptor para hacer frente a tal abuso (Corte Internacional de Justicia, Rec. 1980, par 85).