La progesterona es una hormona sexual liberada por los ovarios y luego por la placenta. Durante el ciclo menstrual, su función es acondicionar el endometrio para facilitar la implantación del embrión en él, y durante el embarazo ayuda a pasar con seguridad.
Este término se estructura por los componentes latinos ¨Pro¨ el cual significa ¨Adelante¨ y el verbo ¨Gestare¨ equivalente a «Estar embarazada».
La progesterona comienza a aparecer después de la pubertad de la mujer, una vez que ha tenido su primera menstruación. A partir de entonces, ocurrirá en cada ciclo menstrual y progresivamente se deteriorara hasta que la mujer tenga la menopausia. De esta manera, la progesterona también ayuda al desarrollo de las características sexuales secundarias de las mujeres.
El papel de la progesterona en el embarazo es incitar al endometrio a producir glucógeno o azúcar. Esto es extremadamente importante ya que el futuro embrión se hundirá en el endometrio y sobrevivirá al alimentarse de glucógeno.
Médicamente, se usa Progesterona Sintética
- Para la preparación de anticonceptivos.
- como terapia de reemplazo hormonal para mujeres en la fase de la menopausia.
- como relajante en el proceso de contracciones.
- como protector para aquellos embarazos en riesgo.
Algunas veces es necesario introducir progesterona externamente para ayudar al desarrollo del embarazo o para tratar otros tipos de problemas. Hay varios casos para los que está indicado.
- Fecundación in vitro: Durante el proceso de medicación para la fecundación In Vitro, el cuerpo reduce considerablemente la producción de progesterona. La administración de progesterona artificial generalmente se administra solo durante las primeras 10 semanas de embarazo, ya que a partir de ese momento la placenta puede producirse sin problemas.
- Riesgo de aborto: Una de las razones por las que el aborto puede ocurrir en un embarazo natural es un bajo nivel de hormonas. Por lo tanto, la forma de prevenir una interrupción involuntaria del embarazo es mediante la inyección de progesterona para normalizar los niveles de la hormona y permitir que el embarazo continúe.
- Cambios en la menstruación: si hay falta o exceso de sangre durante la menstruación, es posible que el médico proponga aumentar la dosis de progesterona para normalizar el sangrado. Esto favorece las posibilidades de embarazo o ayuda a combatir el síndrome premenstrual que causa síntomas tanto físicos como psicológicos.