Pubertad

Conocido como el proceso de cambios en la vida del ser humano, la pubertad abarca cambios muy significativos para el individuo desde físicos (En donde el cuerpo de un niño se convierte en un adulto capaz de reproducirse). El crecimiento se acelera en la primera mitad de la pubertad y alcanza su desarrollo al final. Las diferencias corporales entre niños y niñas antes de la pubertad son casi exclusivamente sus genitales.

Por lo general, esta etapa comienza a los 10 años en las niñas, y a los 11 años en los niños, y es de vital importancia en la vida de las personas ya que los órganos sexuales experimentan cambios importantes que les permiten pasar para ser aptos para la reproducción de especies.
Su inicio coincide con la adolescencia, aunque esta es más prolongada, ya que se extiende hasta la edad adulta, donde las hormonas, pituitaria y gonadotropina, con su estimulación, provoca cambios psicofísicos, que transforman al niño poco a poco en un futuro adulto.
Se pueden considerar cambios físicos diferentes que indican que el niño atraviesa la etapa de la pubertad.

  • Tamaño: Este es uno de los cambios más notorios, algunos niños crecen rápidamente (dan un brinco); otros tendrán un crecimiento lento pero constante hasta que alcancen su altura adulta. La edad a la que esto sucede no es fija. Algunos crecen a una edad temprana, principalmente niñas, que comienzan su desarrollo antes que los niños. Si hacemos una comparación entre un niño y una niña de 11 años, por ejemplo, notará un mayor crecimiento en la niña. Sin embargo, aunque la niña comienza su crecimiento primero, tenderá a ser más baja que el macho al final de su desarrollo.
  • Peso: Esto también aumenta durante la pubertad, pero esto se debe principalmente al crecimiento de huesos y músculos. Debe tenerse en cuenta que el aumento de altura no es proporcional al aumento de peso y por eso los adolescentes se ven larguiruchos y delgados. El período de la grasa tiende a desaparecer al favorecer las piernas y aumentar el crecimiento en tamaño.
  • Glándulas sebáceas y sudoríparas: durante esta etapa se desarrollan las glándulas sudoríparas y las glándulas sebáceas. El joven comienza a sudar excesivamente a veces, y este sudor adquiere un fuerte olor característico.

Cabe señalar que estos cambios se deben a la glándula pituitaria, que tiene forma de guisante y que se encuentra en la parte inferior del cerebro, que comienza a secretar hormonas especiales. Estos, según seas niño o niña, actúas en diferentes partes del cuerpo.
En los niños, estas hormonas se mueven a través del torrente sanguíneo hacia los testículos, lo que les hace comenzar a producir testosterona y semen.
En las niñas, estas hormonas se dirigen a los ovarios y comienzan a producir la hormona llamada estrógeno. De esta manera, comienza la menstruación. La menarca que es el nombre que recibe la primera hemorragia menstrual aparece entre aproximadamente 12 y 16 años. Inicialmente, los períodos menstruales no son regulares.
Los niños también aumentan el volumen de la musculatura, cambian la voz, desarrollan el vello púbico, en las axilas y en la cara, crecen las barbas.
Las chicas desarrollan los senos con pigmentación en la areola, el pelo aparece en el pubis y en las axilas. También hay una redistribución del tejido adiposo, especialmente en los senos, los brazos, los muslos y las caderas.