Rating

Tiene un empleo extendido a pedido de los medios audiovisuales ya que la calificación es una cifra que indica el número de personas, de espectadores que tienen un programa de TV o una emisión de radio. Entonces, cuántas personas más sintonizan una estación de radio o más, miran un programa de TV, cada una tendrá una calificación más alta y la opuesta al inversor.

Es uno de los temas más observados y considerados en televisión y radio, por quienes producen, dirigen y actúan en los distintos envíos y también por los directores de los canales, ya que dos cuestiones clave dependerán de la cifra de calificación. la industria de los medios audiovisuales, por un lado, el número de anunciantes, ya que cuanto mayor sea la calificación, más publicidad habrá para ese programa, eso es algo matemático, y por otro lado, la continuidad o no de un producto en la pantalla es una consecuencia de la audiencia alta o baja, respectivamente.
La calificación es muy importante para la industria de la televisión como se menciona en el texto anterior; ya que está vinculado a la venta de publicidad. Las empresas quieren publicitar sus productos en los programas más vistos: por lo tanto, analizan la calificación para averiguar cuántas personas ven cada programa. Si un programa tiene una calificación alta, habrá más compañías interesadas en publicitar sus tiradas publicitarias. De esta forma, aumenta el costo de publicidad por segundo.
Un ejemplo de calificación puede referirse a los porcentajes de la audiencia que consume diferentes productos de televisión en un intervalo de tiempo; en este caso, hay varias empresas que se encargan de realizar la medición en base a la obtención de muestras estadísticamente significativas.
Por otro lado, la calificación también puede aludir a la capacidad de un agente económico para pagar sus deudas; es la llamada calificación crediticia, que puede referirse a estados, compañías o individuos; en este caso, también hay empresas a cargo de hacer una evaluación, pero obviamente están orientadas a grandes tomadores de deudas.
En el caso de la calificación crediticia, da una cuenta de la capacidad que tiene una determinada entidad para enfrentar sus deudas. Si es el mismo bajo, la deuda se considerará de mayor riesgo y, por lo tanto, estará sujeta a mayores ganancias; esto, en concreto, dará como resultado una disminución en el precio de la misma si hablamos de bonos. En este caso, también hay varias entidades privadas que se encargan de realizar una evaluación correcta de cada caso para posibles inversores; En este sentido, debe recordarse que no todas las entidades de deuda podrán enfrentar riesgos elevados, circunstancia que hace que el rol de estas calificadoras sea de enorme importancia en el mercado financiero.
Sin embargo, ha habido algunos problemas en los últimos años que han cuestionado la probidad de tales agencias de calificación al hacer una evaluación correcta; de hecho, en muchas ocasiones calificaron con las entidades de mayor calificación que se declararon en bancarrota en poco tiempo, lo que generó dudas sobre el proceso.