La resolución de conflictos es una frase empleada para determinar el conjunto de soluciones posibles, otorgadas a un problema que se haya presentado. Es posible mediante el análisis de los inconvenientes ocurridos, intentando encontrar los más adecuados a la situación, evaluando las características del aprieto, los agentes causantes, los sujetos involucrados, las versiones de la historia, revisión de las declaraciones de los testigos y el escenario en donde ocurrió.
También es conocido, la resolución de conflictos presentado como un ejercicio en matemáticas, en el que se representan situaciones de la vida cotidiana que necesitan de sabiduría básica de cálculos. En la sociedad actual, el resolver problemas que pueden interferir en la vida cotidiana y manifestarse como una gran carga, es importante para la convivencia. Normalmente, un mediador es utilizado, para intentar llevar a cabo el análisis del inconveniente y velar por que no se presenten más entre los involucrados. Cabe destacar que las dificultades pueden presentarse en cualquier momento y deben ser resueltos de manera rápida y eficaz, además de beneficiar a las partes dentro del conflicto. Se debe tener en cuenta que la paz tiene que ser mantenida en todo momento.
No existe una fórmula desarrollada para no atraer a los problemas, sólo se debe intentar tener un buen comportamiento, además de apoyar a la tolerancia y el respeto hacia los semejantes. La resolución de problemas, tristemente, no es aplicada de la manera correcta, pues algunas veces las complicaciones aparecen de nuevo e incluso se pueden intensificar, sólo se tiene que poner un poco de esmero en convivir de manera saludable.