Verano

El verano es conocido como una de las estaciones del año que comienza después de la primavera y termina antes del otoño. La temporada de verano se caracteriza por sus altas temperaturas, siendo la más cálida de las cuatro estaciones del año. En el hemisferio norte, se llama «verano boreal» que comienza el 21 de junio hasta el 23 de septiembre y, por otro lado, en el hemisferio sur conocido como «verano austral», comienza del 21 al 20 de marzo.

En consideración de lo anterior, en el hemisferio norte el verano se lleva a cabo en los meses de junio, julio y agosto, mientras que en el hemisferio sur, se presenta en diciembre, enero y febrero. Por lo tanto, son meses es donde se aprovecha el sol, claro, son días calurosos, pero, son días de diversión, paseos, playa, además, tiene algo muy beneficioso para la salud y es que se puede reponer la vitamina D. Es importante mencionar que hay países donde las altas temperaturas se mantienen durante todo el año como en Venezuela
Sin embargo, también tiene sus desventajas al medio ambiente, ya que las altas temperaturas generan vegetación desértica, incendios forestales, pocas precipitaciones que también da como resultado suelos infértiles.  Además de esto, en el ser vivo hay un mayor agotamiento del cuerpo, por lo que necesita descansar e hidratarse constantemente, especialmente los niños pequeños.
El sinónimo de verano es calor. En inglés, la expresión verano se traduce como «verano». Por ejemplo: «el verano es la mejor temporada».
Dentro de las características de esa estación del año, que se presenta en algunos países tenemos que los días son más largos que las noches, la temperatura se mantiene alta y el tiempo caliente.
Todo esto sucede es porque una parte del Planeta Tierra está más cerca del Sol, y cuando pasa más alto en el horizonte da lugar a altas temperaturas, lo que provoca la llegada del verano, a la vez hace que los habitantes de esos países visiten el mar, los ríos, los parques, se puede decir que disfrutan más de la naturaleza.
El horario de verano es avanzar según la zona horaria local, con el fin de aprovechar la luz solar, ya que el sol nace antes.